25 dic 2007

Reflexiones de un retiro II


Me toco la experiencia de asistir por primera vez a un campamento junto a mi comunidad durante el fin de semana pasado; definitivamente fueron unos de los mejores días que he tenido.

La frase que resumio esos días, fue "El yo y la gran Ocasión".

"El Yo"... el que todos debemos luchar por escuchar. Se encuentra naturalmente dentro de nosotros y nos exige la felicidad. Es nuestro corazón. Nos exige la verdad. Es nuestro caballero de batalla en contra de actitudes como La distracción y la Instintividad, que nos hacen vivir en la superficie de la realidad a traves de cosas que no tienen ninguna trascendecia...que nos hacen perdernos a nosotros mismos. Es un signo, una huella...es la presencia de Cristo en nosotros.
"...y la gran ocasión" El impacto que puede producir Cristo en nuestra vida. Él es la gran ocación. Él es la respuesta a la felicidad. Es descubrir y RECONOCER su precencia en todo lo que nos rodea.

Una de las cosas que mas rescato del campamento es la amistad.
El compartir este importantisimo lazo cuyo principal punto en común es Cristo, es muy bonito. Son amistades sinceras, en que el unico interes es descubrir en el otro ese algo especial que nos hace crecer como personas y pasarla bien. Saludos al Nelson (el araña de rincon), al Rorro (el Cristino), a la Cristina (la dorimlona), a la Pabla (Pajera!) a la nixu (la desubicada), a la Paulina (la desaparecida), al Diego (el graciento) y al Feña (el traicionero)

En pocas palabras, este campamento me ayudo a concientizar mas la lucha interna que debemos tener para ser mejores y el impacto que puede tener la presencia de Cristo en nosotros. Y sobre todo, que esta presencia no tendría ningun sentido sin nuestros amigos, familiares y cercanos.
Definitivamente el "patroncito" me lo ha dado todo...no podria pedir nada mas...soy feliz.
UNA MUY FELIZ NAVIDAD Y UN PULENTISIMO AÑO NUEVO LES DESEO DE TODO CUCHARON
=)
QUE DIOS LOS ACOMPAÑE...

10 dic 2007

La importancia de la oración

Me dieron ganas de comentarles un pequeño testimonio de lo que ha significado para mi la oración o del por qué creo que es importante.

El ser mejores personas es algo por el cual todos debemos luchar; debemos ser actores de ello en el transcurso de cada segundo de nuestra vida. Pero esto no tendría ningun sentido o jamas se llevaría a cabo si no nos disponemos de un tiempo de oración, de una intensa comunion con nuestro espiritu y con Dios.

Cuando oramos, entramos en un profundo estado de autoconocimento; las barreras del orgullo y de la inseguridad se van y comenzamos a ver cada detalle de lo que somos; y gracias a ello, lo principal...podemos llegar a conocer a Dios y todo lo que Él nos dice y quiere para nosotros. Por ello, es de vital importancia que, nosotros los cristianos, apostoles de Dios, actores de construir una sociedad mejor, nos alimentemos de la oración; de ese importantisimo motor...

En el transcurso de una oración, me han sucedido cosas muy llenadoras y bonitas. En momentos de mucha tristeza y decepción, he salido muy alegre y con mucho animo de salir adelante, sólo gracias a la oración o a esa conversación con Dios. Asunto curioso a ojos de algunos. Una vez en un momento muy triste, abrí la biblia y me encontre con un titulo que por cierto me venia como anillo al dedo..."Orar sin desanimarse", y la lectura me sirvió mucho. Cada vez que rezo, siento que esa llama que por diversas razones se ha estado debilitando, se recupera y aumenta aún mas.

En la intimidad de las cuatro parades de nuestra pieza y en una profunda paz, de vez en cuando dialoguemos con el "patroncito"...no existe ninguna ciencia para orar, simplemente con tus palabras conversa con Él...siempre estará ahi, dispuesto a escucharte, a consolarte y a darte aliento. El quedrá lo mejor para ti. Incondicinalmente, como tu Padre, siempre te amará.


"Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre." (Mateo 7:7-8).